Por Qué No Podemos Confiar en lo que Dice Nuestra Biblia

Antes de que me linchen en los comentarios, debo comenzar confesando que el título de esta historia es clickbait. La Santa Biblia fue inspirada por el Espíritu Santo y debe ser estudiada como la palabra literal de Dios. No hay duda en eso.

"Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y para instruir en la justicia." (2 Timoteo 3:16)

Dicho esto, es importante entender que, aunque toda la Escritura es inspirada por Dios, las traducciones no lo son. Cuando abrimos nuestra Biblia, es crucial saber que estamos leyendo traducciones de las escrituras originales. Es con gran tristeza que debo escribir que no todas las traducciones son precisas y, por lo tanto, no se pueden confiar ciegamente. Al leer nuestra Biblia, debemos pedir al Espíritu Santo entendimiento y guía. Esto es claro en 1 Corintios:

"Porque ¿quién de entre los hombres conoce los pensamientos de un hombre sino el espíritu del hombre que está en él? De la misma manera, nadie conoce los pensamientos de Dios sino el Espíritu de Dios. Nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que es de Dios, para que entendamos lo que Dios nos ha dado gratuitamente. Esto es lo que hablamos, no con palabras enseñadas por la sabiduría humana, sino con palabras enseñadas por el Espíritu, explicando realidades espirituales con palabras espirituales." (1 Corintios 2:11–13)

La Biblia fue escrita en tres lenguas originales: hebreo, arameo y griego. Es una bendición y un privilegio que tengamos Biblias en inglés que todos podamos entender; sin embargo, según el profesor y autor Joshua Schachterle, ha habido alrededor de 900 traducciones al inglés desde el siglo XVI. ¡Novecientas! Las traducciones han cambiado a medida que los traductores utilizan diferentes materiales de origen (manuscritos), actualizan el lenguaje para que sea más fácil de leer y, en algunos casos muy desafortunados, para ajustarse a una narrativa.

Consideremos los siguientes ejemplos:

1. Mujeres en liderazgo y ministerio
Romanos 16:1

  • Traducción antigua (RVR1977): "Os recomiendo a nuestra hermana Febe, la cual está al servicio de la iglesia en Cencrea"
  • Traducción moderna (NVI): "Les recomiendo a nuestra hermana Febe, diaconisa de la iglesia en Cencrea."

El término "al servicio de la iglesia" en traducciones antiguas se entendía más tarde que debía traducirse más correctamente como "diaconisa". A medida que la iglesia comenzó a aceptar a mujeres en roles de liderazgo, la traducción de la Biblia también cambió, reconociendo el papel de Febe en el liderazgo de la iglesia.

2. Neutralidad de género
Romanos 16:7

  • Traducción antigua (RVR1960): "Saludad a Andrónico y a Junias, mis parientes y mis compañeros de prisiones, los cuales son muy estimados entre los apóstoles, y que también fueron antes de mí en Cristo."
  • Traducción moderna (NVI): "Saluden a Andrónico y a Junia, mis parientes y compañeros de prisión; son destacados entre los apóstoles, y estaban en Cristo antes que yo."

En algunas versiones, Junia se tradujo históricamente como un nombre masculino (Junias), reflejando prejuicios contra las apóstoles femeninas.

3. Raza y etnicidad
Cantares 1:5

  • Traducción antigua (RVR1960): "Morena soy, oh hijas de Jerusalén, pero codiciable como las tiendas de Cedar, como las cortinas de Salomón."
  • Traducción moderna (NVI): "Soy morena, pero hermosa, hijas de Jerusalén, como las tiendas de Cedar, como las cortinas de Salomón."

La palabra "morena" en traducciones antiguas a veces se interpretaba negativamente. Las traducciones modernas suelen usar "oscura"* para reflejar el significado original en hebreo de manera más precisa y evitar connotaciones negativas en esta época.

(*Este ejemplo no pudo ser traducido al español correctamente) 

4. Esclavitud
Efesios 6:5

  • Traducción antigua (RVR1960): "Siervos, obedeced a vuestros amos según la carne, con temor y temblor, con sencillez de corazón, como a Cristo."
  • Traducción moderna (NVI): "Esclavos, obedezcan a sus amos terrenales con respeto y temor, y con sinceridad de corazón, como a Cristo."

Durante períodos en los que la esclavitud era aceptada social y legalmente, las traducciones a menudo usaban términos como "siervos" para reflejar y apoyar la institución de la esclavitud. Las traducciones modernas suelen intentar aclarar estos términos para reflejar las realidades históricas y las condenas de la esclavitud.

5. Lenguaje inclusivo
Génesis 1:27

  • Traducción antigua (RVR1960): "Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó."
  • Traducción moderna (NVI): "Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó."

Las traducciones modernas a menudo usan "ser humano" en lugar de "hombre" para incluir a todas las personas, reflejando una comprensión más inclusiva.

6. Homosexualidad
1 Corintios 6:9

  • Traducción antigua (RVR1960): "¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No os engañéis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones."
  • Traducción moderna (NVI): "¿No saben que los malvados no heredarán el reino de Dios? No se engañen: Ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres."

Dejé lo mejor para el final, por supuesto. He detallado en profundidad lo que se cree que 1 Corintios 6:9 dice verdaderamente sobre la homosexualidad. En este caso particular, los críticos argumentan que estas traducciones fueron influenciadas por visiones teológicas y culturales modernas sobre la homosexualidad. Las palabras se cambiaron para condenar de manera inequívoca (y errónea) la homosexualidad. Recordemos que la palabra "homosexual" ni siquiera estaba en la Biblia hasta 1946. Mientras que la Palabra de Dios es perfecta e inmutable, las traducciones están lejos de serlo.

Es por esto que es triste y decepcionante cuando ciertos cristianos usan sus versículos inexactos como arma para atacar y odiar a otros. Ven a un cristiano gay y van inmediatamente a 1 Corintios 6:9, Levítico 18:22, Romanos 1:27, y otros para justificar ser homofóbicos, juiciosos y condenatorios, sin conocer la verdad detrás de esas escrituras.

Y por eso el título de este artículo dice lo que dice. Aunque podemos confiar ciegamente en la Palabra de Dios, no deberíamos estar tan dispuestos a confiar ciegamente en nuestras traducciones de la Palabra de Dios. En cambio, antes de empezar a leer nuestra Biblia, debemos orar y pedir al Espíritu Santo sabiduría y discernimiento, para que Él nos guíe y nos hable a través de la Palabra de Dios. Con la guía del Espíritu Santo, un cristiano no miraría 1 Corintios 6:9 y comenzaría a atacar a toda la comunidad LGBT. En cambio, creo que el lector sería guiado a investigar más para entender lo que realmente dice el texto. Al menos, el lector no sería llevado al odio y la intolerancia después de leer su Biblia.

Como cristianos, es nuestra responsabilidad buscar la verdad en las Escrituras mediante un estudio diligente, la oración y la guía del Espíritu Santo. Al hacerlo, podemos esforzarnos por entender el verdadero mensaje de la Biblia y vivir sus enseñanzas con amor, compasión y respeto por todas las personas. Acerquémonos a nuestra fe con humildad, siempre abiertos a aprender y crecer en nuestra comprensión de la palabra de Dios.